¿Cómo afecta el ambiente familiar en la autoestima de los niños durante la infancia?
Los expertos afirman que vivir en un clima nutritivo permite que el niño reciba respeto, desarrolle confianza en si mismo y se sienta perteneciente a su grupo familiar, mientras que, un clima inhóspito genera una constante sensación de amenaza, de estar en conflicto y de tener miedo a las personas que tienen autoridad.
La forma de educar se basa en el buen trato, consistencia, coherencia y contingencia.
Consistencia: para determinados hechos, la consecuencia es la misma. Si rompo un florero hoy, la consecuencia para otro hijo, en un mes más, es la misma. Esto genera que los niños perciban un clima de justicia donde existe un trato igualitario, tanto en las exigencias como en las expresiones de afecto.
Coherencia: si hoy las cosas son así, en dos meses más son iguales. Como, por ejemplo, si le enseño a mi hijo que no se miente, cuando llamen por teléfono del banco, no le debo indicar “diles que no estoy”.
Contingencia: si pasa algo ahora, se debe conversar ahora mismo, no la próxima semana. Los niños viven al día, al momento. Frente un determinado acto, sigue el mensaje, porque si no, se restringe el aprendizaje.
Estas tres “C” facilitan en el conocimiento de las normas y consecuencia de su transgresión, ya que permiten que las normas sean claras y le permiten al niño saber que está en un contexto predecible y contenedor.
Fuente:
Anita Ovalle M.
Psicóloga y Supervisora Clínica
contacto@anitaovalle.cl